En una escena salvaje y dramática, una bandada de pelotones enojados lucharon ferozmente para rescatar a sus compañeros primates de las fauces de un cocodrilo gigante.
El incidente del infarto se produjo a orillas de un río en una densa jungla, donde un grupo de flotas se encontraban recogiendo alimentos. De repente, un enorme cocodrilo emergió del agua y rozó uno de los flotadores con sus poderosas mandíbulas.
Sin embargo, las otras flotas no se quedaron de brazos cruzados. Con feroz determinación, lanzaron un ataque coordinado contra el cocodrilo, arañando y arañando su piel escamosa.
El cocodrilo, sorprendido por el inesperado ataque, se vio obligado a soltar a su presa y retirarse al agua.
Pero la lucha de la flota aún no había terminado. Continuaron arrojando piedras y palos al cocodrilo, asegurándose de que se mantuviera fuera de su territorio.
Mientras tanto, el pelotón herido fue rápidamente atendido por sus compañeros, quienes los acicalaron y consolaron.
La increíble demostración de valentía y lealtad entre estos primates es un testimonio de la fuerza de sus vínculos sociales y su determinación de proteger a los suyos.