Cuando el personal de rescate de Animal Aid Unlimited llegó para salvar a un cachorro con una lesión en el cuello, fue una carrera contra el tiempo.
Cuando llegaron, la pobre animalita estaba tirada en el suelo, sin poder levantar la cabeza. El perrito no tenía el cuello roto; más bien, tenía daño a los nervios como resultado de las mordeduras.
Quizás el aspecto más desgarrador de la situación fue que el cachorro reconoció su buena voluntad al intentar rescatarla, pero no pudo levantar el cuello ni la cabeza para reconocerlos. Lo intentó, pero el pobre cachorro no pudo.
Afortunadamente para la perra, estaba en maravillosas manos cuando los rescatistas la acogieron y la llevaron de urgencia al hospital.
Sus cicatrices de punción se habían infectado y la infección se había extendido por todo su cuerpo, por lo que no había tiempo que perder. Le administraron antibióticos y analgésicos y pronto se recuperó.
Tomó algún tiempo lograr que volviera a funcionar, pero el pequeño cachorro demostró que era una guerrera.
Llamaron a la adorable cachorrita Sprinkles y estaban ansiosos por devolvérsela a su madre y a su familia.
Después de dos semanas, durante las cuales demostró ser una completa enamorada del personal de rescate, se reunió con su familia.
Vea el vídeo a continuación: